Búsqueda y descubrimiento
en la obra de Francisca Blazquez en el arte contemporáneo del
siglo XXI
La creación artística
de Francisca Blázquez entra con brío a formar parte del
caudal de pintores interesantes en el escenario del arte
contemporáneo de España del
siglo XXI.
El arte contemporáneo de
nuestro siglo, pasa, a nivel mundial, por un período de
estancamiento en la búsqueda de una expresión especial
para nuestros tiempos: de forma que unos continúan aferrados,
copiando el mundo natural, lo cual es imposible, mientras otros
repiten hasta el hastío el modernismo de los años 20 y
30, y aun peor, sin sentimiento y sin búsqueda, imitan a algo
o a alguien.
El desarrollo del arte contemporáneo
sufre en especial el deterioro de los que, a falta de talento, tienen
dinero y saben organizarse de tal forma que inflan para sí
mismos un nombre falso y exagerado, hasta adquirir fama mundial. Esos
críticos, periodistas y admiradores, fans de tales artistas,
cometen un crimen ante el talento verdadero, que no dispone de las
arriba mencionadas posibilidades. En muchas exposiciones y ferias por
el mundo y en Europa se ve casi siempre el mismo nivel bajo, eso es,
arte repetido, hecho con prisas y de forma superficial.
Con este panorama general, ahora, en
Rusia y en España, empiezan a destacar unos pintores más
jóvenes, en busca de una expresión artística
para el siglo XXI.
El gran retraso que sufre el arte
contemporáneo se nota mucho comparado con el diseño de
interiores, con el desarrollo vertiginoso de técnicas y
materiales de construcción. Pero los bodegones, paisajes y
otras composiciones de género, copiadas de la naturaleza u
otras manchas de pintura sin alma, no se acoplan, no pegan en ningún
sitio, ni en los hoteles, ni en los centros culturales, ni los
aeropuertos, en ningún lugar - hasta tal punto el mundo del
diseño actual ha llenado el hueco del estancamiento en Bellas
Artes-.
Entre los pocos grupos de artistas
nuevos, con talento, que destacan, cuyas creaciones armonizan con el
diseño actual en cualquier centro cultural, museo u otros
lugares, puedo, con toda confianza, nombrar a Francisca Blázquez
- pintora que nos inocula una gran esperanza para el futuro-.
Lo curioso es que muchos pintores sin
conocerse, crean, con una expresión absolutamente individual,
pero que coincide entre sí; este movimiento ha recibido el
nombre de receptualismo por el crítico de arte ruso, Slava
Leon. Por ejemplo, mi arte y mi pensamiento coincide con el
pensamiento de Francisca y con su búsqueda, aunque no nos
hemos puesto de acuerdo, ni hemos visto los esbozos el uno del otro.
Hay tales casualidades donde coincide el talento, auténtico e
interesante, con otros pintores, hermanos del alma en el arte
contemporáneo mundial como es el caso de la búsqueda de
Francisca Blazquez. Hay un futuro que nos sacará del
estancamiento y de la repetición de lo que ya ha sido.
¿En qué consiste el
secreto del arte de Francisca y de otros pintores de su calibre?
La respuesta es que cuando investigan
y buscan no caen en la trampa de repetir el arte de siglos pasados,
ni de imitar a los modernistas, cubistas o impresionistas y otros
istmos, tampoco intentan copiar a los grandes maestros.
Francisca usa objetos absolutamente
reales para crear un mundo personal, sus propias sensaciones, que son
luego comprendidas por el público. Sus composiciones evocan en
cada uno de nosotros, sendos recuerdos de sentimientos fuera de lo
común y cada uno puede recrear su propio mundo de fantasía,
rodeado de los cuadros de Paquita, pintados con gran belleza y
realizados con tanta concreción decorativa que sobrepasa los
límites de la obra realizada y que posee, a todas luces, una
contrastada calidad.
Es, especialmente de mi agrado,
observar que ella encuentra la composición justa para cada
cuadro y nunca cae en la mera ilustración, ni en un caos
superficial.
La armonía de color en sus
creaciones, su capacidad magistral de trabajo, empleando la técnica
del acrílico, su sentido del tamaño del lienzo y de la
composición y muchas más cualidades, nos impulsan a
detenernos ante los cuadros de Francisca para contemplarlos
largamente, y meditar, para sentir la sinfonía de colores, de
tonos y los detalles de la composición.
El pintor dotado de talento sabe
trabajar con cualquier técnica y producir bellas creaciones,
sean cuales sean los materiales empleados. Se sigue considerando a
Picasso un gran artista contemporáneo, porque supo mostrar su
talento en todos los géneros artísticos, expresando
cosas nuevas, más allá de su tiempo.
Francisca, por ejemplo, por citar
otra de sus disciplinas, hace unos magníficos trabajos de
joyería empleando diferentes materiales y con un enfoque
nuevo, sin repetir en nada los millones de creaciones de joyería
de siglos anteriores. Este hecho nos confirma que ella es un artista
de verdad, que indaga y experimenta. Es una pintora cuyos
pensamientos y búsquedas compaginan con similares búsquedas
de pintores en otros países, que desarrollan el receptualismo
como nueva tendencia en el arte contemporáneo. El
receptualismo abarca la fusión de lo real y lo abstracto –
un aspecto del arte sin istmos del pasado, que compagina con la
persona contemporánea, con el mundo del diseño actual y
la arquitectura-.
El éxito progresivo de
Francisca se debe sin duda a su talento natural y a su mirada
contemporánea, pero no menos importante son su gran capacidad
de concentración diaria, la exigencia consigo misma en su
rutina diaria, donde dedica espacio para su búsqueda
artística, la práctica deportiva y el desarrollo
general personal, sin dar lugar a la debilidad, ni a las
distracciones, sin mencionar la pereza o el alcohol. Sólo una
relación así, de dedicación plena al arte,
durante toda la vida, puede producir buenos frutos y ella está
preparada para esta exigencia. Es joven y tiene un gran futuro. Le
deseo que no cese en su búsqueda, que continúe con
ahínco, dedicándose de lleno a su creatividad
artística, sin distraerse, corriendo siempre hacia el arte.
En los últimos años
Francisca ha realizado muchas exposiciones personales y colectivas,
siempre alegrándonos con series nuevas, con innovadoras
búsquedas, que atraen la mirada del espectador, invitándole
a una larga contemplación ante su arte.
Es un éxito rotundo, en una
época en la que son pocos los que se paran ante un cuadro, en
las exposiciones y ferias de arte que abundan por doquier. En esto ha
tenido un gran papel su esposo, amigo y mentor, Joan Lluís
Montané, quien apoya a muchos pintores de todas partes del
mundo, también de gran talento. Slava Leon en Rusia y Joan
Lluís Montané en España comparten una misma
mirada en el desarrollo del arte contemporáneo. Les puedo
nombrar precursores en su búsqueda, que supieron sentir la
nueva corriente en el arte contemporáneo.
Francisca posee un gran mundo
interior, rico en fantasía, inagotable y sin límites,
que imbuye a sus cuadros de un profundo romanticismo. La unión
de dos talentos – Francisca en la pintura y Joan Lluís
en la teoría del arte, ha dado grandes frutos y ha inyectado
una fuente de frescura en el desarrollo del arte contemporáneo
español. Esta unión de creadores dará aún
más frutos en el futuro, que pasarán a la historia del
desarrollo del arte contemporáneo en España.
Miembro de la Academia Rusa de las
Artes. Pintor emérito de Kabardino-Balkaria, Rusia.
Muhadin Kishev
Rusia 2005
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