Gustavo Bertolotto
Se
graduó como Economista en 1972 y se especializó en Aplicaciones de Psicología
Industrial.
En el área Transpersonal se forma, entre otros, con Antonio Blay (Psicología de
la Autorrealización), Concha Quintana y Castermane (escuela de Karlfried
Dürckheim, que integran la meditación Zen con Psicología Jungiana) Claudio
Naranjo (SAT, Eneagrama y Gestalt), Jean Klein y Consuelo Martín (Vedanta),
Antonio Oliver (Antropología cristiana) y ha realizado experiencias con el
Método Feldenkrais, Biodanza, Técnica Alexander, Counselling, sanación
energética, rebirthing, visión aural, chi kung, con la medicina Sintergética del
Dr. Jorge Carvajal...
En el ámbito de la PNL está certificado como Trainer en PNL por Richard Bandler
y como Coach con el código nuevo de PNL por John Grinder. Ambos son los co-creadores
de la PNL en 1975.
En 1989 introdujo la enseñanza de la PNL en España. Ha realizado estudios de
Modelado Conductual Evolutivo con John McWhirter y de Hipnosis Ericksoniana con
Will McDonald, Jeffrey Zeig y Stephen Gilligan.
En 1980 funda en Madrid el Instituto Potencial Humano (IPH) con la vocación de
ser un centro de referencia en el desarrollo del ilimitado potencial dormido que
alberga toda persona.
Desde su nacimiento en el IPH hemos formado a más de 15.000 personas en PNL,
Coaching, Oratoria, Formación de Formadores y otros cursos relacionados con el
desarrollo personal (5 Ritmos, metáforas, control mental, hipnosis y meditación)
y profesional (PNL, Coaching y desarrollo del Potencial Humano en las empresas)
Gustavo es Socio Fundador de la Asociación Española de Programación
Neurolingüística y autor del libro Desarrollo Personal con PNL Editorial Libsa,
1995 (de próxima reedición).
Desde 1996 comienza a integrar sus conocimientos de P.N.L. con los de Psicología
Transpersonal y el resultado es la creación de la P.N.L. TRANSPERSONAL que
podemos definir como: El estudio de los procesos internos que dan a nuestra vida
CENTRO, SENTIDO y CONGRUENCIA.
En los últimos años dirige un Máster en Psicología Transpersonal en el que se
profundiza en experimentar las capacidades poco desarrolladas del Potencial
Humano.
En el curso del 2010-2011 el mapa de ruta de este viaje serán los centros de
Conciencia (también llamados chakras) y la guía de la PNL Transpersonal para
conseguir una colaboración entre nuestra personalidad (ego) y nuestra esencia
(alma).
Utilizaremos la guía del Padre Nuestro como vía para trabajar las conexiones
psico-somático-espirituales contenidas en cada frase y de este modo remover los
obstáculos que dificultan la conexión profunda que permite la vivencia de la
UNIDAD, la Experiencia que cambia la existencia, ya que después de esa vivencia
uno deja de creer porque ha comenzado a saber.
El Padre Nuestro y los Chakras
Hay una sola religión, el amor.
Hay una sola raza, la humanidad.
Hay un solo lenguaje, el del corazón.
Hay un solo Dios y está en todas partes.
Esta conferencia es un acercamiento a la oración central de nuestra cultura
occidental, El Padre Nuestro, que tiene algunas características que la hacen
dignas de estudio.
La primera de ellas es que es prácticamente la única oración que ha sido
elaborada, creada si lo preferís, por un Ser con una categoría espiritual tan
elevada que es reconocido por todas las culturas de la tierra como un Gran
Maestro, un Avatar o, como muchos creen, como el mismo Dios hecho hombre.
Otra característica importante es que esta oración está constituida por siete
cláusulas, algo muy característico de la tradición oriental. El número siete
simboliza la perfección del alma individual, así como el número doce simboliza
el número armónico para el trabajo en grupo. Por el simbolismo del 7 también
podemos relacionar cada una de esas frases con las características bio - psico -
energéticas de los 7 chakras, los centros de energía-conciencia que constituyen
la base del trabajo de Evolución realizado en Oriente.
Dice Emmet Fox hablando del Padre Nuestro: La Gran Oración es una fórmula
compacta para el desarrollo del alma. Fue compuesta con infinito cuidado para
ese fin, de manera que aquellos que la usen regularmente comprendiéndola,
experimenten un verdadero cambio en el alma. No hay más progreso que este
cambio, llamado en la Biblia 'nacer de nuevo'. Y es este cambio en el alma la
única cosa que importa. La mera adquisición por la vía intelectual de
conocimientos nuevos, no opera cambio alguno en el alma; el Padre Nuestro está
preparado especialmente para efectuar ese cambio, y jamás deja de hacerlo cuando
se usa regularmente y con Conciencia, agregamos nosotros.
Relacionar el Padre Nuestro con los 7 centros de Conciencia, que son los chakras,
nos permite conectar con el Egregor (campo de energía-conciencia) generado por
millones de personas orando esta oración durante 2.000 años y al limpiar el
significado superficial que se le atribuido podemos acercarnos a la vivencia de
la Unidad, que es la experiencia que cambia la existencia, ya que después de esa
vivencia uno deja de creer porque ha comenzado a saber.
Gustavo Bertolotto
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